Los productores de cine dominicano no siempre tienen las mejores estrategias para publicitar sus películas. Y cuando el boca a boca del público se encarga de manera espontánea de dar promoción a alguna cinta, es algo que aporta a la magia del cine.
Esto es lo que ha pasado con “Hotel Coppelia”, de José María Cabral, y cuyas imágenes de las escenas de sexo y desnudos que hace en ella Nashla Bogaert, se han convertido en tendencia en los últimos días.
Un caso único en la filmografía local, y que sucede gracias a las facilidades que ofrece la comunicación de las redes sociales.
Esto porque la cinta se encuentra en la oferta de HBO Max, y algunos de los que la vieron en sus casas tomaron fotos y realizaron cortes de videos en sus celulares para compartirlas, despertando más el morbo por ver a Bogaert desnuda, que por la parte artística que pudiera tener la obra de Cabral.
A pesar de que la filmografía local tiene pocas escenas de sexo y desnudos, este elemento no ha sido usado para la promoción en las que sí las tienen.
Esto probablemente porque el quehacer cinematográfico hecho en República Dominicana es más dado a dar publicidad a los “mensajes” morales y aleccionadores, que a tener la intención de provocar al espectador.
De hecho, aún pudiendo haber echado manos de la promoción de que tal o cual película contiene escenas sexuales o desnudos de figuras femeninas conocidas, no ha sido el caso.
Un detalle que probablemente hubiera aumentado el número de espectadores en las salas de cine, aunque fuera sólo movido por el morbo, un recurso que se usó bastante en el estreno de cintas internacionales durante los años ochenta.
Fue el caso, por ejemplo, de “Pimp Bullies”, que Alfonso Rodríguez realizó en 2011, en la que se destacan los desnudos de figuras como la venezolana Chiquinquirá Delgado o las dominicanas Lisbeth Santos y Laura García-Godoy.
A esta cinta se debe añadir “En tu piel”, de 2018, primera película puramente erótica del cine local, y que dirigió el chileno Matías Bize. Producida por Larimar Films, en esta la reina de belleza Eva Arias dejó poco, por no decir nada, a la imaginación en lo que respecta a su escultural cuerpo, en las escenas de sexo que comparte con Josué Guerrero.
En el exterior
Pero esta no ha sido la primera vez que un desnudo ha despertado la curiosidad en los espectadores del cine, por lo que aquí se exploran algunos de los más célebres de las últimas décadas.
Una que se convirtió en estrella de Hollywood gracias a mostrar su cuerpo y sensualidad en las candentes escenas de “Bajos instintos” (Basic Instincts, Paul Verhoeven, 1992), fue la actriz Sharon Stone.
Su interpretación de la presunta asesina que investiga el detective Nick Curran, encarnado por Michael Douglas, la hicieron un símbolo sexual, estatus del que no se ha despegado a pesar de sus 62 años, y el cual le llegó luego de haber realizado varias cintas, pero esta es la que despertó su estrella.
La escena en la que cruza las piernas durante el interrogatorio es ya un clásico del cine. En esos mismos años Demi Moore era de las más deseadas actrices de Hollywood, por lo que todos querían verla sin ropa, un deseo que les fue concedido cuando hizo “Striptease” (Andrew Bergman, 1996), en la que interpretaba a una bailarina de un club nocturno, y quien debía trabajar para mantener la custodia de su hija, al tiempo que era acosada continuamente por el viejo congresista David Dilbeck, encarnado por Burt Reynolds.
Moore protagoniza esta película promocionada solamente por los desnudos, por la suma de US$12,5 millones, un récord en ese momento para el salario de una actriz.
De igual manera, Halle Berry, mostró sus pechos en una escena de la de acción película “Swordfish”, dirigida por Dominic Sena en 2001, sin que aporte nada al avance de la historia. Un destape al que la actriz accedió como una forma de perder el miedo a los desnudos en el cine.